*Jugar desde una mesa en la CDMX, es muy peligroso, el pueblo saldrá a elegir quiere lo debe gobiernar.
Si piensan que los programas sociales federales, servirá para imponer a un X en el gobierno están mal.
Estamos jodidos los Chiapanecos, si para decidir quién nos gobierne esperamos una decisión centralista.
Será que el centro del país conoce los problemas que tiene Chiapas, los pueblos originarios, los de la zona Soconusco, la mesera Comunica, la inseguridad que vive Chiapas e ingobernabilidad.
Sería lamentable que eso no se valore, quien tiene en realidad el apoyo social del pueblo, o están confiados que todos los que reciben programas federales, saldrán a votar por quien les digan.
Viviremos tiempos de rebeldias, que los liderazgos estatales de Morena no permitirán que por cumplir una terminación del INE se impongas a cualquier Juan de las pitas o personas que no representan el sentimiento de los Chiapanecos, si no de grupos de interés que no están en Estado de Chiapas, si no deciden en una mesa desde el centro del país.
Apoco los Chiapanecos no tenemos derecho a decidir por quién votar, a poco nos han robado la libertad de elegir libremente, debemos de quitarnos la idea que sin los partidos que gobiernan, debemos reconocer que son los seres humanos que tomamos esas importantes decisiones.
A sido tanto la propaganda oficialista que nos han hecho querer vender la idea que no hay otra ruta o salida, para decidir con libertad quien nos debe gobernador, que persona o liderazgo, es tiempo de romper las barreras, de saber cómo pueblo de votar por quien nosotros querramos.
Una mala desicion del centro del país va repercutir en muchos estás para ser más claro los 9 que están en disputa electoral, tiene que buscar un método de convencimiento para que todas las partes involucradas estén de acuerdo principalmente al pueblo si es que piensan hacer una farsa con 6 invitados y millones de Mexicanos de Chiapanecos lo aprueben, porque saldrá. con hueso debajo de los brazos.
Algunos quieren servir, tienen el respaldo de la gente y se irán a jugársela con la fuerza del pueblo, porque un pacto entre carroñeros que no se respetará o la firma de un papel no te da derecho a ser víctima de una canallada de aceptar una imposición a luces que es determinante de un grupo selecto que decide y no de un pueblo, sano, trabajador.
Eso deben focalizar los partidos, que podrán alinear a los actores pero no a un pueblo en rebeldía.
